martes, 17 de febrero de 2009

Voy a por tabaco…

Gilipollas de mierda!...¿quieres decirme en qué pensabas??. Seguro que no se te pasó por la imaginación ni un segundo…toda la sangre concentrada en la polla imposibilitó que tuvieras una sola neurona en orden…de haberlas tenido alguna vez…qué gran favor me hiciste, cabrón, nunca antes me habían hecho uno tan inmenso…un cuarto de hora tardé en ser consciente. ¿Sabes?, tres meses en marchitar a tu hijo. No seré yo quién sirva de recipiente para tu miseria…y un mes más en cruzar toda la geografía y echarme un cigarro en tu maldito apartamento…Tú no estabas.

Ceniceros sí, pero no había un puto posavasos donde apoyar el gin tonic que meticulosamente me preparé…primero abrí un limón…Mondé gran parte de su piel, lo hubiera hecho con la tuya, pero no estabas… con el exterior de la cáscara, iba dando golpes secos, contundentes y firmes en el borde del vaso… te los hubiera dado a ti entre las uñas de los pies, pero no estabas…cubito a cubito de hielo los introduje en el vaso. Hasta colmarlo…lo hubiera hecho también contigo. Hubiera introducido por tu maldito, caliente y hedonista culo, uno a uno los hielos hasta rebosarte… Cada cubito de los que había en tu congelador... Pero no estabas… El ácido en exceso no me gusta, pero en la medida justa mata el amargor de la ginebra. Puse un poco de jugo en aquel cóctel. Contigo hubiera sido más generosa, te hubiera exprimido hasta la última gota…lo hubiera derramado sobre tu córnea…sobre tu iris…hasta que desapareciera tu pupila… pero no estabas…De ese horroroso mueblebar que tienes en la sala, cogí la botella de “bifiter” -se me olvidó decirte que a mi la ginebra me gusta Tanqueray-, y añadí tres dedos…Ni un chorreón, ni una puñetera gota de este líquido desperdiciaría en ti… Vacié la lata de tónica y lo removí todo con la misma templanza con la que me dispuse a tomarlo, porque tú no estabas.

Decidí buscar entre tus CD’s…quería encontrar el que más te gustaba…pensé que el de Buika estaría bien… evitaba a toda costa apoyar la copa encima de la mesa del ordenador…Así fue como encontré aquel bendito disco, lleno de fotografías…Lleno de escenas y sexo. Lleno con cada uno de mis rincones…vacío de mí…no era yo quién paseaba en esas imágenes la acera del Darro…en la carátula ponía “Julia y yo, Granada, 8/03/2007”…No eran mis pezones los que estaban en esa habitación de hotel, debajo del objetivo de aquella cenital instantánea …no era yo quién me acariciaba el coño mientras otro alguien disparaba una tras otra toda la serie completa hasta llegar al orgasmo…ambos, supongo…así decidí que porqué no un trío…siempre lo habíamos hablado y nunca lo aceptaste…ese podía ser el momento, ahora no estabas en condiciones de negarte ni de privarme, sencillamente no estabas…ya sin saberlo, era yo quién dirigía mi vida…ella… y tu…y yo… Allí… en tu casa, con vosotros, cachonda, húmeda…le di una calada a mi cigarro. Lo dejé en el cenicero y me bajé la cremallera de los tejanos. …Sabes que no suelo utilizar bragas. Metí mis dedos índice y corazón en el gintonic, y separando mis labios empecé a acariciarme… despacio…sin ninguna prisa...

Metí primera, segunda-tercera-cuarta-quinta…salí de allí. La ciudad parecía un organismo vivo… Conducía y miraba hacia el asiento de la derecha, el sol me deslumbraba, rebotaba en aquel cd, tal vez queriéndome advertir, recordándome cada fotograma de los que traía en el asiento…Llevabas dos meses sin atenderme el teléfono, y de repente una a una, todas las llamadas perdidas, a destiempo, sonaban en mi móvil…

Pobre imbécil, claro que es normal dudar, ¿a qué te crees que me fui a Cádiz, si no a despejar las dudas?…Hasta esa terraza del puerto llegó el hedor a meados de tu retrete. Porque no sé si alguna vez te dije… tus orines nunca los he soportado, huelen horrible… Seguro que las lágrimas baratas que ensuciaron la camisa de Julia, de no habérmelas lavado para la función del día siguiente hubieran dejado el mismo cerco amarillento que cubría siempre la tapa de tu water… Todo tú hueles a orín…Cuanto cinismo tiene la vida, en este reparto, la esposa del topo que me tocó representar llevaba el nombre de tu amante…Quizá ese olor tuyo…si, seguro, por eso nunca me salió pedirte una maravillosa y tibia “lluvia dorada”…

Se ha acabado la función… Te despedí desde el escenario… ocupabas la localidad que lleno de desesperación reservaste... Los cómicos tenemos por costumbre hacernos un homenaje tras la última representación…una fiestecilla. Por supuesto, a la que tú no vendrías… Siempre hay alguien que lleva alguna droga y esas cosas… Lo que nunca falta es alcohol, y buena música…Creo que en alguna ocasión ya te lo había comentado… Esta tocó en casa. Preparé aperitivos y todo. Era de suponer que acabaríamos hambrientos…Más concurrida de lo que esperaba… Vino mucha, muchísima gente. Sabes que a veces me gusta hacer las cosas a lo grande…Lo pasamos muy bien. Recordamos todo lo que nos había deparado cada segundo del montaje, de los ensayos, de nuestros personajes, del público…cuantos encuentros, emociones, e inagotables anécdotas…fue…”mi marido” -el topo- que recordó el estado en que me había conocido, y me vino a la cabeza el disco y su contenido…En mitad de aquella explosión, duchados por esa fina lluvia de estímulos que siempre regala la química, me serví de un proyector…Un haz de luz. Así salisteis del ordenador para vestir estas cuatro paredes hasta entonces más desnudas que vosotros… entre mis cuadros ella posaba ardiente, tú extinguido… Servía vuestra cortina de luces y sombras sin fondo, de antesala, donde consumar por completo nuestra perversión…

Querías protagonismo en mi vida…lo hice…aquí lo tienes, todo tuyo…sin permisos ni autorización que valga…

Te acabo de regalar tu própio final. Feliz san valentín.

4 comentarios:

patry dijo...

Plas plas plas (son mis aplausos desde mi butaca del teatro).
Tienes mucha razón en lo que me pusiste en el blog, a veces nos dejamos llevar por algo inexplicable q nos hae olvidarnos de nosotros y dejamos el papel principal en manos del otro, sin tener en cuenta que podemos ser directores de orquesta y repartir los papeles a quien creamos conveniente y cuando queramos, ser dueños de nuestras decisiones y espacios en una vida donde los demás juegan el papel de los lunares y nosotros los de sastre.....

Besos, besos por todas partes

Anónimo dijo...

rosiiii, hay que dejar de fumar...
encima fortuna....que lo tengo visto en alguna fotillo, yo era de lucky..

que fuerte esto que escribes no....
en fín.. como sois los actores...

saludos..

CHIKENTO dijo...

También me vi obligada a darme mi homenaje particular, tras un Feliz día de San Valentín...

Esta vez no era Julia, ni Rosa, ni Eva, ni Carmen, ni cualquiera de mis enfermizas suposiciones, de mis fantasmas, de mis enfermizos brotes de celos, de mi desconfianza sin argumentos...

Esta vez el fantasma tenía rostro, nombre, voz y una lista de detalles escabrosos que no me cogían de sorpresa.

Tras años de silencio, de humillación, de ser indigna de su persona, recorrí los 500 km mejor invertidos de mi vida, para romper mi silencio con mi mano en su tímpano.

Quizá el te lo cuente de otra manera en alguna de sus visitas a Jaén.

Anónimo dijo...

Lo tuyo es puro teatro... y me encanta. Me encanta no poder diferenciar que partes de esta historia son reales y cuales inventadas... si es que existen tales partes.

Chapeau!

Besos sin sombrero.