”Tengo un truco para cuando las cosas se ponen difíciles...sigo el ritmo que hacen las máquinas y empiezo a soñar...”
Ninguna de ellas traía el manual cuando me hicieron madre. Igual pasó con la mía, y del mismo modo con la suya. He tardado mucho, demasiado en dejar de juzgar, y cuando mejor me lo estoy pasando...ahora es ella, la mía, los míos, quienes imagino insatisfechos de lo que soy, se ponen la toga que esconde todas sus frustraciones y miedos para conmigo emitiendo permanentemente cualquier veredicto que los libere de mi rebeldía, de mi sinsentido, de mi frivolidad, de mis formas poco ortodoxas, de mis ganas, de mis inquietudes y convicciones, de mis palantes, de mis espaldas, de mis deseos, de mi pereza, de mis círculos viciosos, de mis instintos primarios, de mis indecorosos pa fuera... La fiscalía procura que los argumentos queden lo suficientemente enredados en las menores, mientras la defensa lo hace desde el desequilibrio y mi inmadurez...El caso es que mi semana está yendo por los pelos y no tengo el chocho pa farolillos, ni pa entradas en este, mi puto espacio. De todas todas, lo que mas jodido resulta es encontrar una puta tabla que impida ahogarme, porque mi puta terapeuta no se le ocurre otra que enfermar con un puto cáncer cuando estábamos a punto de acabar la puta libreta... Por supuesto no voy a avanzaros ni un ápice de cuanto en ella hay anotado, pero si quiero dejar constancia que hubo evolución cuando en un principio solo definía miserias que poco a poco se fueron tornando en quereres... Los procesos de amnesia también forman parte de mí.
El caso es que cuando llegó el asteroide que definió Trini - mujer de Antonio, amiga de Elena, cómplice de Paco, encontrada por La maestra, residente en Roquetas, descubierta en Baza- donde veníamos los supervivientes, a nadie se le ocurrió repartir linternas que nos alumbraran en la oscuridad... Gracias a que hoy hay una enorme luna llena, mi Aurora, mi gata y mi Nanuk han encontrao el camino y me han traio unos zarcillos pa mi luna...
Gracias por recordarme que “no soy una madre al uso”. Gracias a ti también que combates y eres tan superviviente como yo, por reflejarme y proyectarme eso mismo en el regreso de nuestro Cádiz.
Un Beso musical....porque en los musicales nunca pasa nada malo.
(Así queda pa otra entrada algo mas desarrollá sobre aquellas que desteté...My Story)