martes, 25 de noviembre de 2008

...mi novia se llama Estrella, y tengo un firmamento solito pa ella...

Si señor!!. Cada uno debe hacer su camino. Nadie hace el camino de alguien…Ni lo han hecho por ti y jamás lo harán por mí. Ni ganas. Que en el mejor de los casos a compartir tramos se ha dicho…agua, bocadillos, risas, puntos de sutura y puntos cardinales, anécdotas, y experiencias... Cuando alguien marcha en tu mismo sentido y alcanzas o eres alcanzada, es el momento. Tienen que darse dos, y con estas van tres…Una dirección e igual sentido de la marcha; tal vez lo más, la velocidad que permita un punto convergente; y por último, idéntico deseo de compañía. Es significativo que otro excursionista tenga necesidad de compañía, y particularmente tratarse de la tuya, si no estás jodida…



Tu trocha la tienes perfectamente definida, clara, precisa, firme…desbrozaíta…Te ha permitido encontrarte y encontrarme… y a mí contigo, y a nosotras con las demás, y entre todas nos alumbramos e intentamos no apagarnos, e intercambiar energía en el amago de brillar siempre con la misma intensidad, y que cualquier destello enredoso no nos deslumbre aunque a veces esto resulte difícil… y ahora es un instante pero es tu momento, y no vas a permitir que nadie pulse el interruptor y apague la luz de sala sino para enfocarte con el cañón… y que no eres ninguna samaritana, sabiendo ser amiga…Tampoco es bueno. Y tanto como en estos días hemos discernido sobre madurez e inmadurez vital, nos la aplicamos y nos corremos de gustito que pa eso nuestro trabajo nos ha costao, y que si alguien tuviera la intención de tomar tu brillo ya sabe cual es tu constelación, y todo el camino interestelar que le pueda quedar hasta encontrarte será un viaje monocápsula porque es el único sistema de ser….y que nunca, nunca, nunca, nunca, tu esplendor disminuirá.

Maestra mía, que me gusta besar tus labios y dormirte en mi pecho mientras acaricio tu cabello…Pero qué bien me sientas

016

(…)Te cortaría las uñas de los pies hasta que te quedases sin ellas y tuviera que cortarte, maldita puta, en trocitos los dedos.
Hija de puta... claro que sabes... que quieres que te trate como si fueras una maldita enemiga... O tal vez prefieras que te utilice como un horno crematorio... que me fume un paquete de tabaco negro y apague cada cigarro en tu puta piel. El primero lo apagaré sobre la palma de la mano, el segundo lo apagare sobre tu sobaco..., el tercero lo apagare sobre tu pezón izquierdo, el quinto sobre tu pezón derecho, llenare de ceniza el hueco de tu ombligo y allí apagaré el sexto, el séptimo lo apagare sobre tus muslos, en cada hueco de los dedos de tus pies apagaré otro cigarro, ya sólo me quedarán tres para acabar el paquete. El cigarro número 18, lo apagaré en tu cara, o mejor aún lo encenderé, te lo meteré por los agujeros de tu nariz para que se consuma poco a poco. El cigarro número 19, me servirá para quemarte los pelos de tu puta cabeza. Y el último cigarro, lo utilizaré para quemarte los labios y en ese momento, en mitad de un grito de dolor, dejes de hablar y de respirar (…)

(…)Me siento ultrajada, humillada, injuriada, insultada, ofendida, deshonrada, mancillada, embestida, deteriorada, ajada, malograda, golpeada, zurrada, vejada, forzada, desflorada, violada, profanada, liquidada, eliminada, inmolada, despachada, exterminada, destrozada, reventada, aniquilada, acabada, ejecutada, ajusticiada, apuñalada, acuchillada, acribillada, disparada, tiroteada, ametrallada, estrangulada, acogotada, desnucada, envenenada, lapidada, apaleada, difunta, cadáver, víctima, desolada, deshabitada, desértica, vacía, marchita(...)

“Combatientes”
Antonio Hernandez Centeno